¿Alguna vez te has imaginado cómo es que se fabrica el vehículo en el que te transportas diariamente?, ¿el avión en donde has viajado por motivos laborales o de vacaciones?, ¿la herramienta que usas en casa para reparar una fuga de agua?
Podríamos seguir mencionando diversas situaciones como estas que muy seguramente en algún punto te han generado curiosidad, pero… ¿qué tienen en común estos ejemplos?
¡Exacto!, el uso de un material tan interesante como conocido por todos nosotros: el acero.
El acero es uno de los materiales que, por sus amplias aplicaciones, se encuentra entre aquellos metales de mayor uso en la vida diaria de millones de personas, y que debido a su cotidianidad muchas veces los procesos de manufactura que lo transforman (desde la extracción de minerales hasta la refinación del acero y posteriores procesos de conformado) en objetos indispensables para la vida diaria pasan desapercibidos, entre ellos, el tratamiento térmico en todas sus variables.
Pero, ¿qué son los tratamientos térmicos?
La American Society for Metals (ASM por sus siglas en inglés), define los tratamientos térmicos como una combinación de operaciones de calentamiento y enfriamiento controlados en tiempos determinados y aplicados a un metal o aleación en una forma tal que producirá propiedades deseadas.
¿Qué es el temple?
Entre los procesos de tratamiento térmico de mayor interés para académicos y la industria, se encuentra el temple del acero. De acuerdo con la ASM, el temple es aquel proceso que consiste en enfriar rápidamente al acero en un medio determinado desde la temperatura de austenización, que típicamente se encuentra entre 810 – 900 °C, hasta temperatura ambiente.
¿Para qué se templa el acero?
Como lo hemos platicado con anterioridad, el acero posee diversas aplicaciones y cada una de ellas requiere distintas características para desempeñar sus funciones de manera adecuada, dichas características se ven mejoradas por medio del temple.
Es decir, el temple es aquel tratamiento térmico a través del cual el acero mejora sus propiedades mecánicas tales como la dureza, microestructura, resistencia y tenacidad.
Tipos de temple
Entre las distintas variantes de métodos de temple podemos encontrar los siguientes:
- Temple directo
- Temple por inducción
- Temple a la flama
- Temple por aspersión
Medios de temple
La selección de un medio de templado depende de la templabilidad de la aleación a tratar, el espesor y la forma del componente, así como de las velocidades de enfriamiento necesarias para lograr la microestructura deseada. Los medios de enfriamiento más comunes son:
- Aceites
- Polímeros
- Agua
- Sales
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